¿A qué se debe que consideremos fundamental reflexionar en relación a este tema? El ser conscientes que nos encontramos en un cambio de era, de la industrial a la digital o de la era de la obediencia a la colaboración, automáticamente nos hace reflexionar en relación a nuestro nivel de consciousness, minset, skillsets, practice & results que conservamos hoy. La era digital trae consigo una profunda transformación cultural, que toca a cada ser humano del planeta en su totalidad y en la forma de relacionarnos como humanidad en todos y cada uno de los ámbitos sociales.
En el ámbito organizacional los líderes son los llamados a generar esa transformación en conjunto sus equipos. Si entendemos lo crucial que es el liderazgo en todos los ámbitos de la vida, y lo central que es hoy como líder impulsar en todos y cada uno el desarrollo ejecutivo de los miembros de nuestros equipos, sería un error que las organizaciones no dedicaran tiempo y esfuerzo a identificar y desarrollar ejecutivos con las competencias necesarias para desempeñar este papel clave y, hoy, en ese sentido el COACHING EJECUTIVO, DE EQUIPOS Y ORGANIZACIONAL, ejerce un papel fundamental en cualquier grupo humano, especialmente en el entorno laboral, donde su influencia puede ser decisiva para el éxito colectivo en colaboración dentro de una organización.
En este sentido, el coaching ha emergido como una metodología de gestión clave en el desarrollo de habilidades profesionales y personales. Esta metodología se basa en el más profundo respeto por cada ser humano, generando que las personas se hagan responsables de sus procesos de aprendizaje y sus resultados, generando autonomía reflexiva y acción responsable de cada uno de ellos. Según Bill Hawkins y Tom Pettey, el coaching es “la metodología más utilizada para alinear las expectativas de las organizaciones con los objetivos y expectativas de rendimiento individuales; es crear un perfil de comportamientos de liderazgo específicos que se esperan a futuro y dar a los líderes de la organización la oportunidad de que se les brinde retroalimentación sobre su rendimiento contra dicho perfil”. ¿Están dispuestas las organizaciones a invertir en el desarrollo de una nueva consciousness, minset, skillsets, practice & results a través del coaching para acelerar tu potencial y alcanzar tus objetivos? ¿Estás dispuesto como ejecutivo hacerte cargo de tu aprendizaje?
LOS PRINCIPALES DESAFÍOS ACTUALES DE LAS EMPRESAS
El entorno empresarial está en constante evolución y las organizaciones hoy tienen múltiples desafíos que impactan su capacidad para crecer, mantenerse vivas y competitivas. Desde la gestión del cambio hasta la retención de talento, las empresas deben adaptarse a las nuevas demandas del mercado, fomentar la innovación y mejorar su sostenibilidad. Superar estos obstáculos requiere estrategias sólidas, liderazgo estratégico colaborativo y una visión clara del futuro. Desde CCTL Group identificamos los siguientes desafíos:
1. Gestión del cambio:
El crecimiento empresarial está estrechamente ligado al cambio, lo que puede generar resistencia dentro de las organizaciones. Para superarlo, los líderes deben comunicar claramente los beneficios del cambio y fomentar la participación de los empleados. La adaptación constante es clave para el éxito, y una mentalidad flexible y abierta puede convertir los desafíos en oportunidades de crecimiento.
2. Transformación cultural:
Cambiar la cultura de una organización implica una congruencia en todos los elementos del ecosistema. Armonía entre las personas, la estructura de la organización, los sistemas, procesos y el liderazgo. Entendiendo liderazgo como la capacidad de generar cambio en un equipo o en una organización.
3. Desarrollo ejecutivo:
El liderazgo es esencial para el éxito de cualquier organización. Los líderes empresariales deben evolucionar constantemente, desarrollando habilidades clave como la toma de decisiones estratégicas, la inteligencia emocional y la capacidad de inspirar y motivar a sus equipos. El desarrollo ejecutivo implica proporcionar a los líderes actuales y futuros las herramientas y el conocimiento necesarios para navegar por la complejidad empresarial, adaptarse a los cambios y fomentar una cultura de crecimiento y responsabilidad. Programas de formación continua, mentoría y coaching son fundamentales para asegurar que los líderes estén preparados para afrontar los desafíos del entorno empresarial.
4. Desarrollo de habilidades de los trabajadores:
Para que una empresa crezca y se mantenga competitiva, es fundamental que sus empleados estén equipados y entrenados con las habilidades adecuadas. Esto implica el desarrollo de competencias técnicas y también el fortalecimiento de habilidades blandas como la comunicación, el trabajo en equipo y la adaptabilidad. Las organizaciones deben invertir en la capacitación continua de su personal, fomentando una mentalidad de aprendizaje a lo largo de toda la carrera. Al hacerlo, no solo se aumenta la productividad y la eficiencia, sino que también se eleva la satisfacción laboral y se crea una plantilla preparada para enfrentar los retos del futuro.
5. Escalabilidad en el tiempo:
El crecimiento debe ser planificado de manera estratégica para que la empresa pueda mantener su calidad y rendimiento. Esto incluye invertir en tecnologías y procesos escalables, anticipando las necesidades futuras. La escalabilidad demuestra la capacidad de la empresa para adaptarse a la demanda creciente de forma sostenible.
6. Retención de talento:
A medida que las empresas crecen, la competencia por talento aumenta. Es esencial crear un entorno laboral atractivo, donde los empleados se sientan valorados, escuchados y respetados. Esto va más allá de incentivos económicos, incluye el desarrollo profesional y un fuerte sentido de pertenencia, que las personas se sientan dentro de una comunidad de confianza.
7. Innovación continua:
Para evitar la complacencia y obsolescencia, las empresas deben fomentar una cultura de innovación y experimentación. La creatividad y la adaptación son fundamentales para seguir siendo competitivos. La innovación implica nuevas ideas y la disposición a ajustar estrategias que ya no son efectivas.
8. Gestión de la complejidad:
El crecimiento empresarial incrementa la complejidad operativa, lo que exige optimizar procesos y estructuras. Simplificar y automatizar tareas permite a las empresas mantener la eficiencia y adaptarse con agilidad a las demandas del mercado. La simplicidad es clave para la sofisticación y el éxito a largo plazo.
9. Alineación con la Agenda 2030
Para las empresas, adoptar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 no es sólo una cuestión ética, sino también una oportunidad estratégica. Las organizaciones deben integrar estos objetivos en su planificación a largo plazo, enfocándose en áreas como la sostenibilidad ambiental, la igualdad de género, el trabajo digno y el crecimiento económico. Esto implica desarrollar políticas que reduzcan su huella ambiental, promover la responsabilidad social corporativa y adoptar prácticas empresariales inclusivas.
10. Diversidad, equidad e inclusión (DEI):
Uno de los desafíos más relevantes para las empresas actuales es crear un entorno laboral diverso, equitativo e inclusivo. Las organizaciones deben ir más allá de cumplir con normativas y adoptar un enfoque activo que promueva la igualdad de oportunidades para todos, independientemente de su género, raza, etnia, orientación sexual o discapacidad. La diversidad impulsa la innovación, ya que equipos con diferentes perspectivas y culturas pueden abordar problemas desde ángulos únicos. La equidad asegura que todos los empleados reciban un trato justo y tengan las mismas oportunidades de crecimiento y desarrollo. La inclusión, por su parte, garantiza que todos se sientan valorados y escuchados, creando una cultura organizacional más fuerte y cohesionada. Integrar una política efectiva de DEI no solo es ético, sino que también aumenta la competitividad y la sostenibilidad a largo plazo.
11. Paridad y transparencia
La paridad, entendida como igualdad de participación y transparencia, es clave para crear relaciones laborales justas. Las empresas deben asegurar que todos los empleados tengan voz y acceso a las mismas oportunidades. Asimismo, la claridad en los contratos, tanto laborales como comerciales, previene malentendidos, fomenta la confianza y reduce conflictos. Esto impacta directamente en la mejora en la satisfacción de empleados y socios, fortaleciendo la reputación de la empresa como promotora de justicia, equidad y buen trato entre colaboradores (internos – externos).
COACHING: UNA FORMA DE VIDA, UNA MANERA DE RELACIONARSE
La biología-cultural, propuesta por Maturana, aporta una visión relacional que se alinea profundamente con la práctica del coaching sistémico, el cual se basa en la teoría de sistemas que dice que todas las partes de un sistema están interconectadas y que cualquier cambio en una parte del sistema afectará al sistema en su conjunto. Según esta teoría, el ser humano no sólo es un organismo biológico, sino un ser cultural, cuya identidad y comportamiento están moldeados por las interacciones con su entorno social y cultural.
En la práctica del coaching, se trata de entrar conscientemente en ese espacio de “no saber”, donde existen múltiples respuestas posibles. El objetivo es ver, vernos, respetar y respetarnos, porque en ese entender y en esa observación se genera una comprensión mutua, tanto para el coachee como para el coach.
Para Maturana, el lenguaje es un espacio donde creamos realidades, entonces, las conversaciones entre coach y coachee no son sólo intercambios de información, sino oportunidades para generar nuevas formas de ver y vivir el mundo. En el coaching, esta co-creación de realidades nos permite ampliar nuestro horizonte de posibilidades y diseñar futuros alineados con nuestros valores y deseos.
El coaching se basa en una relación de paridad entre coach y coachee, en la que ambos participan de manera igualitaria en el proceso de reflexión y aprendizaje. En lugar de imponer soluciones o directrices, el coach acompaña al coachee en la exploración de sus propios recursos y capacidades, facilitando un cambio profundo y duradero. Esta relación horizontal fomenta una dinámica de colaboración y respeto mutuo, donde el coachee es siempre reconocido como un legítimo otro, capaz de construir su propio camino hacia el éxito y al desarrollo de sus habilidades que son únicas como individuo.
La biología del conocimiento nos permite entender qué vemos lo que vemos producto de nuestra biología. Esto abre una manera enteramente nueva de comprender el aprendizaje humano y el coaching profesional.
EL PODER DETRÁS DE LA METODOLOGÍA: VANGUARDIA DE LA GESTIÓN
El Modelo “Armonía del Ser”, inspirado en la biología-cultural de Humberto Maturana y la ontología del lenguaje, según nuestras investigaciones y experiencia en CCTL Group, completan el círculo de bienestar humano, nos invita a entender el poder de la metodología del coaching desde una visión integral y relacional. Este enfoque sostiene que los seres humanos somos sistemas biológicos-culturales, donde nuestras emociones, pensamientos y comportamientos están íntimamente conectados con nuestras interacciones sociales y el entorno en el que nos desenvolvemos.
El coaching, al adoptar este modelo, reconoce que la transformación del coachee no se da sólo a nivel conductual, sino que también involucra un cambio profundo en su manera de ser y de interactuar con el mundo. El Modelo “Armonía del Ser” tiene en cuenta múltiples dimensiones que permiten un desarrollo completo y armonioso del individuo. A continuación, desglosamos los principales componentes de este modelo:
1. Emociones
Las emociones son fundamentales en este modelo, ya que influyen directamente en cómo interpretamos la realidad y nos relacionamos con ella. En coaching, trabajar con las emociones del coachee ayuda a generar autoconciencia y permite identificar emociones limitantes o facilitadoras. Reconocerlas es clave para movilizar los recursos internos necesarios para el cambio.
2. Conversaciones
Las conversaciones son el núcleo del proceso de coaching. A través de la misma, coach y coachee co-construyen nuevas realidades. Según Maturana, el lenguaje no sólo describe el mundo, sino que lo genera. En este sentido, las conversaciones permiten abrir nuevos horizontes y posibilidades de acción para el coachee, quien descubre alternativas que antes no consideraba posibles.
3. Actos Lingüísticos
Dentro de las conversaciones, los actos lingüísticos juegan un rol fundamental. Estos incluyen afirmaciones, declaraciones, juicios, pedidos, ofertas y promesas. El coaching se enfoca en cómo estos actos lingüísticos impactan la vida del coachee, ayudándolo a revisar los juicios que tiene sobre sí mismo y el mundo, a hacer compromisos más efectivos, y a utilizar el lenguaje como una herramienta poderosa para crear nuevas realidades.
4. Mindset
El mindset o mentalidad hace referencia al conjunto de creencias que un individuo tiene sobre sí mismo, los demás y el mundo. Este pilar del modelo es crucial en el proceso de coaching, ya que ayuda al coachee a identificar creencias limitantes que podrían estar obstaculizando su progreso. El cambio de mindset es una transformación interna que impulsa nuevas formas de pensar y actuar. El objetivo es que el coachee pueda pasar de una mindset fijo a un mindset de crecimiento.
5. Epistemología
La epistemología se refiere a cómo construimos el conocimiento y entendemos el mundo. En el coaching, se cuestionan las formas de conocer del coachee y se exploran nuevos modos de aprendizaje. Este enfoque permite al coachee desaprender creencias o patrones obsoletos y abrirse a nuevas formas de entender y actuar en su entorno.
6. Comportamiento
El comportamiento es la manifestación visible de las emociones, pensamientos y creencias del individuo. En el coaching, se trabaja para que el coachee alinee su comportamiento con sus objetivos y valores. El modelo «Armonía del Ser considera» el comportamiento como una expresión de la identidad del individuo, y la transformación de estos hábitos es esencial para el crecimiento personal.
7. Fisiología
Finalmente, la fisiología también juega un papel clave en el proceso de coaching. Según la biología cultural de Maturana, las emociones y el comportamiento están conectados con el cuerpo. El coaching invita al coachee a tomar conciencia de su estado fisiológico (postura, respiración, tensión, etc.) y cómo este afecta su emocionalidad y capacidad de acción. La integración de la fisiología en el proceso de coaching permite una transformación más profunda y coherente entre mente, cuerpo y acción.
Con el panorama actual a nivel organizacional, el coaching sistémico ejecutivo, de equipo y organizacional se convierte en una necesidad en lugar de un lujo. Las personas bien coacheadas han demostrado una mayor capacidad para enfrentar desafíos, colaborar eficazmente y adaptarse a los cambios.
El coaching sistémico se caracteriza por su capacidad para navegar y valorar la diversidad de perspectivas y enfoques dentro de un grupo y por lo tanto de las personas. Con la globalización, los equipos multiculturales son la norma, y no la excepción. Un enfoque sistémico de coaching permite comprender y apreciar estas diferencias, fomentando un ambiente inclusivo en el que cada miembro del equipo se siente respetado, valorado y escuchado. Esto mejora la cohesión del grupo, impulsa la creatividad, la innovación y el rendimiento general del equipo, maximizando su potencial colectivo e individual.
La mirada sistémica del coaching, aplicado tanto a nivel individual como en equipo, supone un cambio de paradigma ya que se basa en la colaboración dejando atrás la era del control desafiando los límites tradicionales del coaching. Es una respuesta directa a las necesidades de un mercado que busca optimizar la eficiencia, mejorar la productividad e integrar de forma inmediata los principios del coaching en la práctica diaria. El coaching sistémico fortalece la cohesión del equipo al incentivar la participación activa de todas las personas, no únicamente del líder, del cliente particular y de los colaboradores.
Donde el cambio es constante y la diversidad es una fortaleza, el coaching sistémico es una ventaja competitiva y la única vía esencial para liberar el máximo las habilidades, el potencial humano a través del Modelo “Armonía del ser” y la sostenibilidad organizacional.
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